Aunque muchos afirman que se trata sólo de publicidad para calentar el estreno de la nueva telenovela "La Tempestad", lo cierto es que el actor William Levy y la ex Miss Universo, Ximena Navarrete, no la han pasado bien en el inicio de las grabaciones, por lo que el cubano ya explotó por tantas críticas en su contra.
Esta cadena de incesantes especulaciones han cuestionado directamente su reputación como actor. De forma muy sutil, pero evidente, el ex modelo ha expresado su descontento ante las informaciones que aseguraban que el retraso que vive la producción televisiva se debía principalmente a su rigidez interpretativa en el set de rodaje.
"Gracias por todo el apoyo y el cariño. Les quiero", dedicó el caribeño a sus seguidores de Twitter, antes de arremeter contra los responsables de los comentarios maliciosos que pueblan el panorama mediático de México. "Cuando dejamos de temer a lo que digan los demás, dejamos de ser ovejas para convertirnos en león. Entonces un gran rugido surge del corazón, es el rugido de la libertad", reza el mensaje que William, quien incorporó a su perfil citando al filósofo y místico indio Osho.
Lo cierto es que el exuberante actor necesitará grandes dosis de meditación y misticismo para aislarse de la avalancha de rumores que amenazan con hacerle perder los nervios, de entre los cuales se ha destacado últimamente su supuesto hartazgo ante las extensiones de pelo que debe llevar en su nueva serie.
William interpreta en "La Tempestad" al capitán Fabré, un rudo marino cuya rubia melena está sometida constantemente a las inclemencias de la meteorología y a los fuertes vientos, unas condiciones adversas a las que se unirían los más triviales picores que el falso cabello provoca en el cuero cabelludo del artista.
Pero la supuesta aversión de William a las pelucas sólo supone la punta de un iceberg de especulaciones que, anteriormente, se han cebado con la hipotética enemistad y falta de sintonía profesional entre la estrella y la coprotagonista de la serie, Ximena Navarrete.
Al igual que el cubano, la ex Miss Universo también ha sido acusada de no estar a la altura del nivel interpretativo de la novela, por su nula experiencia como actriz y, a pesar de su mala relación, los dos habrían sido enviados juntos a tomar un curso intensivo de interpretación, para acelerar el rodaje y huir de la mediocridad.
De hecho, los objetivos principales de estas lecciones de actuación consistirían, según publican varios medios latinoamericanos en mejorar la incomprensible vocalización de William y liberar a Ximena del nerviosismo y los temblores que sufre cuando se sitúa ante la cámara.
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